debeleer.com >>> chapter1.us
La dirección de nuestro sitio web ha cambiado. A pesar de los problemas que estamos viviendo, estamos aquí para ti. Puedes ser un socio en nuestra lucha apoyándonos.
Donar Ahora | Paypal


Como Puedo Descargar Libros Gratis Pdf?


De aqui se sale – Mario Conde

Algo de fondo se agita, se mueve en la sociedad española. Y ciertas agitaciones se perciben en diferentes sociedades europeas. También en Estados Unidos se advierte cuando menos cierta confusión. Posiblemente no resulte excesivo afirmar que algo vibra en el mundo occidental. Quizá a algunos no les guste el diagnóstico, pero estos movimientos claramente indican que existe una conciencia de que en temas importantes, en asuntos de trascendencia social, hemos fracasado. Y esos temas y asuntos son decisivos para el modelo de convivencia. Materia de primer orden, desde luego. En España disponemos de cifras capaces de causar una enorme preocupación. Me refiero a indicadores económico-sociales de presente. Lo peor es que no se puede afirmar seriamente que en un plazo muy breve de tiempo —la brevedad la reclamaría la gravedad de los datos— seamos capaces de dar un giro suficientemente importante para sustituir parte de la preocupación por cierta tranquilidad. Desgraciadamente, no lo parece. En noviembre de este año 2011, forzadas por las circunstancias financieras y económicas, se celebrarán elecciones generales en España. Todas las encuestas indican que el PP, el partido actualmente en la oposición, será el triunfador, y de cumplirse esos pronósticos, dispondremos de un Gobierno de corte ideológico distinto. Cuando menos de corte partidista diferente. Así, como digo, rezan las encuestas. Pero lo malo es que esas mismas encuestas señalan otro factor de enorme importancia: una gran parte de los españoles carece del convencimiento de que con ese nuevo Gobierno las cosas, la situación en general, va a mejorar de modo importante en plazo corto. Hay una base de desconfianza que alcanza al Sistema. Y es que la valoración de la clase política y de los partidos políticos, y por derivada, del modelo vivido de democracia parlamentaria, se encuentra bajo mínimos. No podemos extrañarnos de este estado de cosas. A lo largo de varias décadas lo hemos ido gestando entre todos. No se trata ahora de atribuir culpabilidades exclusivas a la banca, a la clase política, al gobierno o gobiernos de turno, a los jueces, a los medios de comunicación… Cada uno de ellos, unos más y otros menos, son parcialmente responsables del estado de cosas en el que nos toca vivir. Pero el gran responsable somos nosotros mismos, la sociedad, porque gracias al abandono de ciertos valores y al consumo de otros disvalores, hemos ido confeccionando un modelo de vida que ahora nos agobia por demasiados costados a la vez. Tenemos lo que hemos querido tener, lo que hemos gestado, en ocasiones por acción, en otras por omisión, pero, al fin y al cabo, el resultado es el derivado de nuestra conducta, y esta es la secuela de nuestro modo de pensar. Así que no expresemos culpabilidades puramente ajenas. Debemos incluirnos en el cuadro de responsables si queremos ser sinceros.


Y si esto hacemos tendremos ante nosotros una oportunidad, sabremos convertir lo que es una desgracia medida en sufrimientos ciertos de cientos de miles de personas en una oportunidad para construir un mejor modelo de vida. Pero para ello es imprescindible saber por qué hemos llegado hasta aquí, qué hay de cierto y verdad en el funcionamiento de los medios de comunicación, en el sistema financiero, en la clase política… Tenemos que ser capaces de entender las causas para cambiar el modelo, para introducir las reformas necesarias para alcanzar un modo de convivencia que merezca el calificativo de más humano. Y si así lo hacemos nos daremos cuenta de que la clave consiste en que nosotros, la sociedad civil, recuperemos algo esencial: ser dueños de nuestro destino. A lo largo de décadas lo hemos puesto en manos de una clase política profesionalizada que poco a poco se ha convertido en casta y que al tejer un entramado de intereses con el sistema económico, sustancialmente financiero, y los medios de comunicación social, ha implantado un modelo de ejercicio del poder al que llamo Sistema. Y ese modelo, junto con nuestro consentimiento tácito o entusiasta acerca de su existencia, es lo que nos ha llevado a la situación en la que estamos. En 1992 en el Vaticano, en 1993 en la Universidad Complutense, en 1994 con mi libro El Sistema, advertí de lo que estaba ocurriendo y de que, si continuábamos caminando por el mismo sendero, las posibilidades de fracaso colectivo eran elevadas. Hablaba desde la experiencia de haber sido presidente de una de las entidades financiero-industriales más potentes de España. No teorizaba sin más. Sentía la preocupación derivada de lo que veía, lo que experimentaba, lo que conocía por mí mismo y no por relatos ajenos. Han pasado muchos años desde entonces. Desde mi primer movimiento en esa dirección han transcurrido diecinueve años. Mucho tiempo, en el que mi vida se ha visto sometida a una serie de avatares complejos y difíciles. Pero ahora me encuentro de nuevo con la ilusión de poder escribir. No ya para decir algo así como: «Señores, ¿lo ven? Yo tenía razón». No, no se trata de eso. Al contrario. No consumo vanidades. No me alimento de aplausos tardíos. Quiero escribir para aportar algo a la oportunidad que tenemos por delante de construir un futuro mejor. Cierto es que todo lo que sucede en el presente es derivada del pasado, y por ello el conocimiento de ese pasado es imprescindible si queremos edificar el futuro sobre bases sólidas. Con estas dos ideas nace este libro. Conozcamos el porqué de nuestra situación, asumamos nuestra responsabilidad, y tengamos el valor de aportar todos algo de esfuerzo, ilusión y hasta de valentía para reconducir la situación. Porque es evidente que de aquí se sale, como reza el título del libro. Pero debemos saber dónde entramos. Y asumir que si nada hacemos, que si dejamos que las cosas sigan funcionando por el sendero de siempre, caminaremos hacia peores datos y mayores sufrimientos.

No podemos esperar que la clase política por sí sola afronte el cambio que reclaman los hechos. Es necesario que la sociedad, como digo, recupere el protagonismo y quiera ser verdadera dueña de su destino. Ese es el reto. Y por eso este libro: para contribuir a que trabajemos para lograrlo. Somos muchos los que sentimos que algo no funciona. Y eso hay que saber explicarlo, desde la experiencia de haberlo vivido en primera fila, en la fila cero, como dicen algunos. El poder no se suele explicar a sí mismo. Pero es imprescindible relatar cómo funcionan de verdad las cosas en nuestro país. Explicar el pasado desde la experiencia y el conocimiento para que nuestras propuestas de reforma no sean emociones alimentadas de una extraña revancha, sino propuestas inteligentes, sensatas, posibles, avaladas por la experiencia, que no vayan contra nadie, que no busquen culpables con las linternas del odio o la revancha, sino que traten de algo tan sencillo como eso: encontrar un modelo de vida mejor y más humano.

.

Declaración Obligatoria: Como sabe, hacemos todo lo posible para compartir un archivo de decenas de miles de libros con usted de forma gratuita. Sin embargo, debido a los recientes aumentos de precios, tenemos dificultades para pagar a nuestros proveedores de servicios y editores. Creemos sinceramente que el mundo será más habitable gracias a quienes leen libros y queremos que este servicio gratuito continúe. Si piensas como nosotros, haz una pequeña donación a la familia "BOOKPDF.ORG". Gracias por adelantado.
Qries

Descargar PDF

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

bookpdf.org | Cuál es mi IP Pública | Free Books PDF | PDF Kitap İndir | Telecharger Livre Gratuit PDF | PDF Kostenlose eBooks | Baixar Livros Grátis em PDF |